En México, la pérdida de fertilidad de los suelos es alarmante, dado que es biológicamente improductivo, contaminado, agotado e incapaz de mantener altos rendimientos en los cultivos, puesto que de estas áreas de cultivo existen 139.9 millones de hectáreas, equivalentes al 70% del neto, con niveles de materia orgánica muy bajos; en tanto que 62.15 millones de hectáreas, equivalente al 31% del total, se asocian a problemas de acidez, y 146.8 millones de hectáreas que corresponden al 73% tienen poca capacidad de intercambio catiónico (Foto: Especial)