Sheinbaum, bajo un escenario económico, político y social complejo
Redacción
Ciudad de México.- Claudia Sheinbaum Pardo, es la primera mujer en ser presidenta de México, tras 203 años de ser un Estado independiente, pero más allá de este fenómeno histórico, la mandataria enfrenta una coyuntura caracterizada principalmente por riesgos económicos, políticos y sociales.
Representando a Morena, la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México menciona reiteradamente que seguirá el camino de “transformación” que empezó la Administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, cuya marca ha sido la reconfiguración el papel del Estado en la economía, la implementación de programas sociales ambiciosos y una política energética encaminada a la autosuficiencia.
No obstante, Sheinbaum Pardo debe lidiar con problemas estructurales que persisten y, los cuales hasta se han acentuado. Uno de ellos es la elevada inflación —la cual comenzó al alza desde marzo de 2021, al ubicarse fuera del rango permanente del Banco de México, que es de 3%— y el debilitamiento de la inversión privada, aunado a la incertidumbre en el comercio internacional.
El objetivo básico de la jefa del Ejecutivo federal, es que tome decisiones propias y novedosas que permitan un crecimiento económico sostenido y equitativo. Por ejemplo, en la inflación debe priorizar que no escale a más de 8% como estuvo en el sexenio anterior, al tiempo que debe garantizar que mayor crecimiento en el país.
UNA CIENTÍFICA POR PRIMERA VEZ
De acuerdo con una nota de El Economista, del 11 de septiembre pasado, urge que esta autoridad implemente “políticas fiscales y, sobre todo, monetarias eficaces para controlar este fenómeno, calibrándolas para evitar un impacto negativo en el crecimiento económico y la creación de empleos”.
Otro elemento que destaca en su principiante gestión, es que por primera ocasión, México es encabezado por una científica, quien tendrá que aprovechar la relocalización industrial de las empresas en curso, cuyo fenómeno económico marcará el camino de lo que sucederá en las siguientes décadas. En ese sentido, el país está obligado a aprovechar el potencial de la inversión extranjera para México, el cual entre 2023 y este año suma más de 170 mil millones de dólares.
Aunque no debe obviarse que existen tensiones comerciales, como las que se han visto en los paneles de disputa del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) sobre todo en energía. Por ello, es crucial que lleve a buen puerto su anuncio de transición energética y cambio climático.
EL APOYO A CFE Y PEMEX
México depende hoy en día de los combustibles fósiles, tan es así que el apoyo estatal a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) retrasan el desarrollo de energías renovables, aunque a inicios de noviembre, Sheinbaum Pardo dio a conocer la nueva estrategia nacional en este ámbito, la cual según explicó Luz Elena González Escobar, titular de la Secretaría de Energía, impulsará la transición a energías renovables, mayor autosuficiencia energética, eficiencia y racionalidad en el consumo eléctrico, a la par de que los precios y tarifas no incrementarán en términos reales, ello para lograr la “justicia energética y desarrollo inclusivo”.
La evaluación de Sheinbaum Pardo dependerá de los próximos meses, tomando en cuenta que recibió un país con finanzas públicas ajustadas en virtud del gasto atípicamente elevado de este año.
CRISIS DE DESAPARECIDOS
Para muchos expertos, el principal reto es que admita que México atraviesa una crisis humanitaria de proporciones mundiales, en desaparición de personas, por lo que se espera que Sheinbaum Pardo asuma su responsabilidad y se comprometa a encontrar a estas gentes. A la par, la nación tiene que detener y resolver la grave crisis forense que acumula más de 72 mil cuerpos sin identificar, este reto consiste en que se bajen sustancialmente los homicidios dolosos, los cuales este año cerrarían cerca de los 36 mil casos y de un acumulado superior a los 204 mil de diciembre de 2018 a el mismo mes, pero de 2024.
Esta problemática de seguridad es heredada, puesto que, durante el sexenio de López Obrador, México tuvo los años más violentos de su historia reciente, con niveles récord de homicidios y la persistencia de grupos del crimen organizado. Además, quedó claro que la estrategia de "abrazos, no balazos" no sirvió como se prometió, puesto que con ella afirmaban que bajarían sustancialmente estos crímenes.
Pese a que Sheinbaum Pardo delineó su estrategia de seguridad, la cual es casi igual a la de López Obrador, es necesario que articule una estrategia más efectiva para combatir la violencia sin abandonar por completo los principios de no militarización, pero al mismo tiempo generar resultados tangibles que disminuyan la percepción de inseguridad en el país.
Con base en el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante el mandato de 2023 del tabasqueño se revirtió la tendencia al alza de los homicidios en el país, cuya tasa cayó a 24 por cada 100 mil habitantes.
Un elemento que Sheinbaum Pardo siempre presume es que cuando gobernó en la Ciudad de México de 2018 a 2023 consiguió reducir cerca de 50% los homicidios, por lo que ampliará a nivel nacional sus políticas que implementó, por lo que inició una coordinación entre policías y fiscales.
MIGRACIÓN Y EFECTO TRUMP
Otra clave del gobierno de Sheinbaum Pardo pasará por la relación con Estados Unidos y, en particular, por lo que ocurra en la frontera común de 3 mil 200 kilómetros.
Y es que el cruce de migrantes sin papeles desde México es uno de los puntos políticos más sensibles en Estados Unidos, que en noviembre pasado volvió a darle el triunfo en las urnas a Donal Trump, quien amenazó a Sheinbaum Pardo con imponer aranceles de hasta 100% si ella no lograr frenar la migración y el tráfico de drogas a su país.
Las entradas de indocumentados de distintas nacionalidades a EU desde México se desplomaron este año, luego que en diciembre de 2023 se anotara un récord mensual de detenciones por parte de agentes fronterizos.
De acuerdo con los expertos, estos resultados se atribuyen a las a restricciones que puso el presidente Joe Biden, para dar asilo a migrantes sin documentos y a la cooperación México; aspecto que difícilmente se volverá a repetir bajo el mandato de Trump, quien asumirá el 20 de enero de 2025.
Respecto a las turbulencias generadas por el magnate neoyrquino, sobresale que el peso mexicano inició la primera semana de noviembre con una fuerte depreciación frente al dólar “gringo”, posicionándose otra vez como una de las divisas más afectadas a nivel global.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Banco Base, comentó en ese momento que "la amenaza de nuevos aranceles representa un riesgo significativo para la economía mexicana”, aunque consideró que no cree que el mandatario electo llegue a cumplirlas.
VISITAS DE ESTADO Y POBREZA
Como se sabe, el mandato de López Obrador se caracterizó por una notable abstinencia autoimpuesta de la política exterior, y es que durante sus cinco años y 1o meses sólo visitó un país de habla no hispana: Estados Unidos. Mientras que viajó al extranjero en 2021 a Centroamérica: Belice, Cuba, El Salvador, Guatemala y Honduras.
No obstante, Sheinbaum Pardo ha mostrado que por ahora se aleja de esta política aislacionista y prueba de ello es que en la segunda quincena de noviembre acudió a la reunión del G20 en Río de janeiro, Brasil; estos eventos López Obrador siempre los desechó como si no fueran importantes.
Además, la presidenta tiene la tarea de redefinir la relación de México con Estados Unidos, en un contexto de tensiones comerciales y migratorias. López Obrador mantuvo una relación pragmática con el expresidente Trump y el actual jefe de Estado Joe Biden, y es que sus políticas migratorias, particularmente se basaron en emplear a la Guardia Nacional para detener los flujos migratorios, lo cual fue motivo de controversia. Tras ello, Sheinbaum Pardo deberá equilibrar las exigencias de Estados Unidos con una política migratoria que respete los derechos humanos y no dependa exclusivamente de la militarización.
Por otro lado, la desigualdad y pobreza es el tema pendiente de todos los sexenios y es que a pesar de los avances de los programas sociales, el 42% de los mexicanos aún vive sin acceso a una buena calidad de servicios en educación y salud, lo que limita las oportunidades de millones de habitantes para integrarse plenamente en la economía. Sheinbaum Pardo tiene que garantizar un equilibrio entre el gasto social sin comprometer la estabilidad fiscal y así evitar un déficit creciente.
EL FACTOR AMLO E IMPOSICIÓN
Fue el 2 de junio un día histórico para México, puesto que el triunfo electoral de Sheinbaum Pardo tuvo un sinfín de significados, desde su gestión en la Ciudad de México hasta su efectiva campaña electoral. Pero también contó con el apoyo clave de un presidente con alta popularidad, como lo es López Obrador.
Después de esto, “opinólogos” y la “comentocracia” se han cuestionado cuánto se parecerá o diferenciará ella a la de su “padrino político”. Aspecto que inevitablemente va a definir su mandato hasta el 30 de septiembre de 2023.
Según el columnista Raymundo Riva Palacio, estar bajo la sombra del tabasqueño urge que la mandataria demuestre que tiene su propia capacidad de liderazgo, ello mientras “navega” por un contexto político y económico complejo.
Para el comentarista, el arranque de la Presidencia está marcado por la presencia de López Obrador, puesto que, durante la transición, el tabasqueño se apoderó de la agenda de Sheinbaum Pardo y le quitó tiempo útil al llevársela a su gira nacional de despedida.
“Esta dependencia ha provocado dudas sobre si Sheinbaum podrá distanciarse de su mentor y afirmar su propia independencia en el liderazgo político del país”, mencionó Riva Palacio.
LA VEN SIN CAPITAL POLÍTICO
Debido a estos sucesos, decenas de críticos y analistas políticos sostienen que López Obrador y su círculo cercano creen que Sheinbaum Pardo carece del capital político que él tenía para manejar la protesta social o enfrentar a los medios.
Riva Palacio sostiene que la figura de López Obrador no sólo influye en la política, sino también en las percepciones públicas y ejemplificó que en septiembre pasado, una encuesta de De las Heras/Demotecnia, señaló que el 61% votó por Sheinbaum, el 70% confía en ella y el 75% considera que a México le irá mejor bajo su liderazgo. Pero las expectativas también son altas, especialmente en temas de inseguridad, donde el 67% cree que la situación mejorará con Sheinbaum en comparación con López Obrador.
Un elemento importante que comenta el columnista es el carácter de Sheinbaum Pardo, el cual a su parecer, juega un papel fundamental en su capacidad para gobernar. “No es la sumisa que algunos creen”, enfatizó, al tiempo que subrayó que la mandataria tiene un temperamento fuerte y una atención al detalle que contrasta con la actitud más despreocupada de López Obrador.
“La historia sugiere que Sheinbaum necesita manejar con cuidado las relaciones políticas y dejar que pasen los meses, quizás hasta un año, para irse sacudiendo al ala radical obradorista que la perjudica”, apuntó Riva Palacio.
IMCM