Charlie Watts, el corazón de los Stones
Por Carlos Meraz
La batería es el corazón de una banda de rock, ya que sus sonidos son las pulsaciones que marcan el beat o ritmo a seguir por los demás ejecutantes. El pasado 24 de agosto, The Rolling Stones perdió su corazón y vitalidad, paradójicamente encarnada en un músico inquietantemente sereno, de incipiente cabellera blanca e impecable vestir: Charlie Watts.
La “piedra” angular y también la primera en caer dentro de la longeva alineación británica ha sido la de su elemento más viejo y menos mediático, su baterista desde hace 59 años, quien —según palabras de Mick Jagger y Keith Richards— era el indiscutible verdadero líder de Sus Satánicas Majestades.
Con una formación jazzística que alternó con su modesta faceta de rockstar, Watts pese a su apacible, reservada y tímida personalidad, en las últimas mastodónticas giras del mítico grupo siempre solía ser el más aclamado por las audiencias en ambos lados del Atlántico, tras ser presentado al final de cada concierto.
Y es que Watts era el más “normal” de los Stones, no era aeróbico como Jagger, ni sobreviviente a los excesos como Richards o simpático como Ron Wood, sino un músico de oficio que simplemente se limitaba a hacer lo suyo, sin preocuparse de su blanca cabellera y su pose de jubilado en fiesta de adolescentes.
En 1998 tuve la oportunidad de entrevistar face to face a Jagger y posteriormente a Richards, en una sesión de prensa en el Four Seasons de West Palm Beach, y a otros compañeros del contingente de medios mexicanos les tocó Watts y Wood; molestos por no tener al carismático cantante ni al guitarrista principal casi querían linchar a la gente de la disquera de México. Hoy, esos colegas en lugar de berrinches seguramente ya se han de jactar de que alguna vez tuvieron la oportunidad de charlar en persona con el icónico baterista, que desde ayer se integró al Olimpo de leyendas del rock.
Sin los precisos y potentes redobles de Watts en su batería Gretsch en el himno de The Rolling Stones, (I Can’t Get No) Satisfaction, jamás volverá a escucharse igual en directo la emblemática canción, si es que Mick Jagger, Keith Richards y Ron Wood deciden continuar con su postergada gira No Filter por la Unión Americana, ya que al menos por ahora el tour corre el riesgo de ser cancelado o de anunciarse como el último —ahora sí, en serio y sin trucos publicitarios— tour de la banda más grande sobre la faz de la Tierra: “Ladies and gentleman... The Rolling Stones”.