El PSG golea hasta con rotaciones
Redacción deportes.- Con la Ligue 1 vista para la sentencia y rotaciones de Luis Enrique Martínez antes de encarar el enorme desafío de voltear la eliminatoria de 'Champions' en Anfield ante el poderoso Liverpool, el París Saint Germain se levantó con una goleada en los minutos finales de su visita al Stade Rennes (1-4).
La distancia es tan extensa, 16 puntos al Olympique de Marsella antes de su duelo ante el Lens, que Luis Enrique pudo dar prioridad a la batalla de Anfield. Necesita a sus referentes frescos de piernas y de inicio descansaron Fabián Ruiz, Vitinha, Achraf Hakimi, Ousmane Dembélé y Kvhcha Kvaratskhelia. La entrada al campo y la alianza de los tres últimos, convirtieron los apuros que sentía el PSG en un paseo.
El Stade Rennes fue un equipo combativo desde el inicio. En mitad de tabla, con poco que perder ante su afición, tomó el encuentro como un día de fiesta. A los segundos ya avisaba a Safonov que tendría trabajo. Pero el momento del equipo de Luis Enrique es tan bueno en su competición, que pronto avisó de que, pese al once, tomaría en serio el pulso. Kang-in Lee y Lucas Hernández explotaban las bandas en las primeras acciones de peligro.
Ya era el dueño de la posesión el PSG. El primer golpe de un equipo al que se le caen los goles, era cuestión de tiempo. Barcola y Gonçalo Ramos se buscaban. Samba salvaba la primera tras la internada de Barcola, veloz y habilidoso antes del disparo. Y aumentaba la dificultad de la parada ante el remate de Ramos al centro preciso de Kang-In.
En la siguiente acción no perdonaba Barcola en la primera oportunidad del conjunto parisino de coger al rival con la línea defensiva adelantada. La posición muy justa, al límite del fuera de juego en el arranque, y la definición con sencillez en el uno contra uno. Por debajo de las piernas de Samba.
No encontraba el Rennes la forma de llegar a portería rival. Su intento de reacción incluso le pudo costar caro si hubiesen tenido mayor precisión Kang-in y Barcola, que estaban en todo. De golpe, de un centro desde el costado izquierdo rematado por Meite, acarició el empate a cuatro minutos del descanso. El travesaño lo impidió.
Todo parecía quedar sentenciado a los cinco minutos de reanudarse el encuentro, después de que Samba salvase de nuevo a su equipo ante Mayulu, cuando Gonçalo Ramos dejaba un tanto de 9, adelantándose a la defensa al centro desde el costado izquierdo. Anulado en primera instancia por su posición en el inicio de jugada y validado desde el VAR.
Sintiendo todo perdido se desató el Rennes, aumentó la intensidad y se lanzó a atacar en busca de goles. Estrechó el marcador, a los 57 minutos, con el gol de Brassier. Y hasta sintió la igualada, tras pedir penalti por empujón a Truffert cuando iba a rematar de cabeza, en un balón muerto que perdonó Meite con un disparo centrado, sencillo para Safonov.
Llegó a detener otro disparo, de Matusiwa, en plenas oleadas del Rennes, pero el PSG ya transmitía otras sensaciones con la entrada de titulares. Kvaratskhelia, con un rival cansado, se adueñó del escenario. Las carreras de Achraf Hakimi tuvieron espacios para ser letales. Y Dembélé pudo extender su momento goleador.
Primero perdonó lo imperdonable, en un contragolpe de tres contra dos, el regalo de Kvaratskhelia rematando forzado a puerta vacía. Se desquitó con el regalo de Hakimi y con un buen zurdazo desde la frontal que cerraron una nueva goleada de un París Saint Germain intratable en la Ligue 1, que calentó motores para Anfield.